Antes y después

Tomé mi primera clase de yoga con 18 años justo cuando empezaba la universidad. Después de 5 años donde pasé por períodos difíciles de mucha ansiedad decidí practicarlo más enserio. En pocos meses mi práctica era diaria, fui a varios estudios, pero donde me sentía más cómoda era con la práctica en casa así que me centré en las clases online. Tras varios años de práctica constante sentí que el yoga se había convertido en un pilar indispensable en mi vida, muchas personas de mi entorno empezaron a preguntarme si yo podía darles clases. Tras mi primera experiencia enseñando a mis amistades, supe que quería dedicarme a tiempo completo al yoga.

El camino de alumna  a estudiante.